El día (2-1-1999) recibí refugio Budista, de las manos del Lama Ole Nydahl, del Linaje Karma Kagyu, el nombre que se me dio, fue “Karma Kunsang Dorje” (All Good Daimond) (El Diamante de todo lo Bueno), lamentablemente ni en ese momento, ni hoy considero que eso sea del todo cierto, pero si es cierto que para tallar ese diamante se tuvo que cincelar y a golpes para desgastar la piedra, en algunos casos con las manos precisas de un gemólogo y en otras con las de un cantero inexperto, aun así, creo que el paso por el lijado y la pulitura son los peores, donde ya sabes lo que quieres, ya “Sabes que está allí y no lo quieres perder” pero llego la hora de agarrarte la cara y arrastrarla por una piedra de liga y luego por una de pulir, arrancando poco a poco e irremediablemente capa a capa de la piel, hasta dejar por fin algo que nos parece bonito. El “4 de Bastos”, es ese proceso inefable y en casi todos los casos “Muy doloroso” que nos conduce a la perfección, pero estoy muy consciente de que cuando el diamante olvida por un instante todo el proceso, deja de ser una (joya) y pasa a ser un simple y triste objeto de valor, que posiblemente nunca vea la luz del sol dentro de la puerta de una caja fuerte o como dice el titulo de la película: “Diamantes de Sangre”, simplemente “porque lo valgo” y en ese caso si puedo decir que se pierde todo el valor y simplemente se convierte en “(precio)” o (una prenda de cambio).
Ahora después de casi 15 años de ese acontecimiento, siento aun más inmerecido este nombre y entiendo que he de esforzarme más cada día, para no defraudar esa confianza puesta en mí por Buda en las manos del Lama Ole.
En muchas ocasiones escucho a personas que tienen grandes problemas y cada vez que se les plantea una opción de cambio responden: “Yo soy así”, “el que me quiera, tiene que respetar mi forma de ser”, “¿Por qué soy YO el que tiene que cambiar?. Lamentablemente allí mismo estamos delante de la respuesta: Si todo te va mal, si el mundo se te voltea, si todos te dan la espalda, ¿No te das cuenta de que es algo en ti, que está mal?, ¿No te das cuenta de que, No vas por el camino correcto, ¿no ves que ese “YO”, te está alejando cada segundo un poco más de la felicidad?. He reconocido y lo hago cada instante de mi vida y comprendo que muchos de los que me leen, son familiares, amigos de infancia y compañeros del colegio y sé que todos coincidimos en que más que un pequeño diamante como dice el “Lama”, yo soy un pedazo de Carbón mineral, y de diamante poco, pero también puedo decir por muchas conversaciones que he tenido en el transcurso de la historia con ellos, que la presión ejercida y las altísimas temperaturas que han fundido mis carnes y mis huesos, poco a poco se ha creando algún tipo de cristal fundido que semeja a un cristal de arena silícea a la orilla de cualquier playa.
Cambiar nuestra forma de ser, “No, nos debilita”, todo lo contrario, “nos permite crecer y con esto, conseguir la felicidad por añadidura.
Mañana en el Amor: En muchas ocasiones, la mejor forma de ayudar a algún familiar o amigo, es escucharlo y “NO OPINAR”. En el Dinero: Cuando se nos avecina un cambio, “Siempre” veremos las señales en el camino” y si en algún momento se te abalanza un cambio y no lo viste, eso solo dice que estas distraído de tu vida. En la Salud: Todos sabemos que discutir es malo, recuerda que si uno evita, dos no pueden.
Feliz Día, que Dios los bendiga y un abrazo.
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