Me da algo de gracia que ayer les escribía sobre el As de Oros, y les recomendaba llevar la agenda, les confieso que en muchas ocasiones pienso, si realmente les puede interesar esos temas, pero entonces pasa algo como lo de hoy, el “8 DE OROS”, que simplemente me da una cachetada y me dice: “Ricardo, despierta, tu sabes que si no tienes idea de lo que quieres, no obtendrás nada en la vida y para rematar, mientras redacto estas líneas, me llama la amiga de la que les hice la referencia y me pregunta si puede añadir una cosa más a su lista específicamente me preguntaba: ¿Puedo escribir?, que: ¿Quiero vivir con ese hombre?.
El “8 de Oros” nos deja por primera vez ser conscientes de nuestros logros, no es igual cargar a tu bebe recién nacido en el hospital, que cuando lo vez hecho un hombre, profesional y exitoso económicamente, es solo en este momento en el que podemos decir: “Lo logré”. Pero les advierto que este instante es igual de mágico maravilloso para el bien y para el mal, son muchos los que al vivir este momento, ya se sienten viejos, con edad de jubilarse o que ya no tienen nada que hacer, pero les recuerdo que mi madre enviudo a los 46 años, a los 70 se volvió a casar y allí están ese par de chicos ochentones paseando mundo. Cuando nuestras neuronas entienden que queremos seguir viviendo, que tenemos nuevos retos y mayores deseos, la vida nos recompensa con “Tiempo”, pero si solo nos dedicamos a lamer las heridas y ver nuestras desgracias, ese tiempo se convierte en un reloj de arena que se extingue cada segundo un poco más.
Recuerdo con una sonrisa en los labios: cuando me faltaba solo un mes para terminar el servicio militar, nos advirtieron que era cuando mas desertaban las tropas, eso me pareció incongruente, solo a un mes y lo cambian por la cárcel, “pero bueno”, déjenme echarles un cuento, creo que ha sido el peor periodo de mi vida, realmente nuestro cerebro comienza a detener el tiempo y cada segundo se convierte en un infierno, todo esto, solo porque mi mente sabia que detrás de esos 30,29, 28, … días, estaba la tan ansiada libertad. Esto es una razón más para estar muy conscientes de lo que se pide y no solo pedir. “yo siempre les digo que yo también quiero 1.000.000.000 de Euros, pero realmente estoy preparado para esa responsabilidad o es mejor comenzar por el primer millón, o quizás por los primeros cien mil.
Mañana en el Amor: llego la hora de llamar o visitar a la familia de la que estamos un poco alejados, perdonar y perdonarnos es siempre el mejor camino. En el Dinero: revisa, para que no salgas de casa con ropa deteriorada. En la Salud: Nuestros mayores, son nuestros tesoros, hay que cuidarlos y mimarlos como a un collar de diamantes (O MÁS).
Un abrazote, que Dios los bendiga y feliz día
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